2. El Kilómetro Cero
Para ser un país de tan largas y maravillosas rutas nacionales, el monolito del Kilómetro Cero en Plaza Congreso de Buenos Aires a unos metros de El Pensador de Rodin es francamente decepcionante en su volumetría (apenas un mojón agrandado) y grotesco en su vandalización… aunque últimamente lo repararon y protegieron un poco.
No sé si corresponde a la ciudad, a Vialidad Nacional o al Ministerio de Turismo replantearse la cosa y dignificar lo que hay o hacer algo más condigno pero a mi me parece que un país que dispara desde allí rutas nacionales tan espléndidas como la 3, la 7 o la 9 debería pensar algo mejor, más no sea de cara al turismo internacional.
Entre ese pobre monolito y el a veces también vapuleado y contiguo Pensador de Rodin (uno de los cinco originales de la obra) el efecto es deprimente: si el Kilómetro Cero es o está así, uno se pregunta cómo serán o estarán los kilómetros mil o dos mil y pico de esas rutas nacionales.